Maica Imbernon, secretaria General de USOCV, y Vicente Forner , secretario de Comunicación han presentado el análisis de los datos del estudio del mercado laboral en la Comunidad Valenciana.

Los trabajadores de la Comunidad Valenciana han perdido en los últimos dos años 3 puntos de poder adquisitivo en sus salarios con respecto a las subidas del IPC. En concreto, los que cuentan con un convenio colectivo han perdido 2,9 %, mientras que los empleados públicos se dejan 3,1 puntos.

También en contratación la Administración es peor que el sector privado. En Comunidad Valenciana, la tasa de temporalidad es 6 puntos superior a la nacional y se ha incrementado en 4 puntos en estos dos años. Ahora mismo, más de 1 de cada 3 empleados públicos en la región es temporal. En el sector privado, se ha reducido a la mitad, hasta el 12,3 %, como la media del país.

“La Comunidad Valenciana vive un buen momento demográfico, con un incremento de casi 150.000 personas activas en dos años; más de la mitad de ellas, mujeres. Y 115.200 nuevos ocupados. Sin embargo, nos preocupa el envejecimiento de esta población. La mayoría tiene más de 45 años y, entre los más jóvenes, hay menos ocupados que en 2022. Como sindicato, nos preocupa esta falta de relevo, propiciado por el éxodo de jóvenes y por las malas políticas de conciliación que favorezcan la vida familiar”, denuncia Maica Imbernón, secretaria general de USO-Comunidad Valenciana. a lo que añade la inquietud por la temporalidad y parcialidad del empleo y el peligro del empleo en sectores estratégicos en la Comunidad Valenciana como el del automóvil o a la cerámica, ambos con muchas dificultades.

Otro mal dato que arroja la Comunidad Valenciana está relacionado con el paro. “Aunque el paro registrado ha bajado en casi 38.000 personas, la realidad es que las personas que no trabajan han crecido en 21.000. Esto se debe a no contabilizar a los fijos discontinuos que están inactivos. Aquí, han crecido en 40.000 personas en dos años, cerca de duplicarse. El mal uso de este contrato desde la reforma laboral ha precarizado una figura que era clave para los trabajos estacionales”, denuncia Vicente Forner.