Las acciones jurídicas de USOCV consiguen el cobro de sexenios del profesorado de religión
febrero 21, 2022USOCV se ha concentrado hoy a las 12 horas en las distintas sedes y centros de trabajo por la paz en Ucrania, mostrando nuestra solidaridad con el pueblo ucraniano y exigiendo que Rusia pare su brutal ataque
marzo 9, 2022Este 8M, celebramos el Día Internacional de la Mujer poniendo el foco en un problema que, aunque no es nuevo, ha cobrado especial relevancia en el contexto de la pandemia por covid-19: el desigual reparto del tiempo de trabajo remunerado y los cuidados entre hombres y mujeres.
Muchas familias tienen problemas para conciliar su vida laboral y personal en España, pero el peso de estas responsabilidades familiares recae, sobre todo, en las mujeres. Este desigual reparto del tiempo, del que vienen alertando varias instituciones nacionales e internacionales, trae como consecuencia una importante brecha de género a nivel laboral y económico. Una brecha que, por otro lado, se ha visto agravada por los efectos de la pandemia, que han acentuado notablemente las desigualdades.
Para acabar con la desigualdad es necesario un cambio cultural
Cuando las mujeres se ausentan del trabajo, renuncian a parte de su carrera profesional, pierden poder adquisitivo e independencia, y dejan de acceder a puestos de responsabilidad. Todo ello supone dejar de participar en la vida pública de la misma forma en la que lo hacen los hombres. Las decisiones que se toman en empresas o instituciones afectan a toda la sociedad, y esa es una razón de peso para que mujeres y hombres encuentren en ellas una igual representación a todos los niveles.
Las políticas de igualdad que se han aprobado hasta ahora han facilitado la conciliación, pero no han evitado que se sigan reproduciendo los roles tradicionales de género. Han facilitado la conciliación, sí, pero la conciliación de las mujeres. Durante los últimos meses, además, hemos podido comprobar cómo las medidas de conciliación implementadas durante la pandemia han sido un absoluto fracaso, como el Plan MECUIDA, insuficiente.
Desde USO, creemos que la solución al problema de la desigualdad pasa necesariamente por un cambio cultural que lleve a la corresponsabilidad, a la implicación de toda la sociedad, especialmente de los hombres, así como al reconocimiento de los diversos modelos de familia. Es por ello que reivindicamos que, aunque el día es de todas y cada una de las mujeres, la lucha es de todas y todos.
Los cambios culturales auténticos no son rápidos, llevan trabajo y esfuerzo. No dejemos esto también solo en manos de las mujeres.